TESTIMONIO

PADRE DE FAMILIA

(trabaja en banco)

Cada vez, a nuestro alrededor el acceso a la información, los medios de comunicación, la sociedad en general, nos va planteando nuevos retos, nos encontramos con interlocutores más profesionales, y tenemos la obligación de estar preparados. No bastan palabras bonitas, repetir sistemáticamente, basarnos en la propia experiencia, no, tenemos que saber de que hablamos, como hablamos, con quien hablamos para ser altavoces eficaces Cristo.

Hay que saber: de Teologia, Cristología, Ciencias Religiosas, etc, pero también, de comunicación, marketing, diseño, música, nuevas tecnologías, para adaptarnos a las personas que nos escuchan y al lenguaje con el que se expresan, y hacer como los buenos médicos, nunca acabar de formarte. Hoy, por ejemplo, son las 22:34h.

Llegué anoche de un curso de Marketing en Madrid, a las 4 de la mañana y trabajé durante 9 horas y media. Ahora, me encuentro vectorizando un dibujo para hacer las camisetas de un concierto para jóvenes que haremos, donde cantaré hip hop con música hecha por ordenador, todo ello fruto de mucha curiosidad y de tiempo de preparación…. Ah, y por si se lo preguntan, la energía se saca de la vocación apostólica. Si no, ahora estaría probablemente viendo el Síndrome de Ulises o el Partido del Getafe, pero no llegaría a la cama con la satisfacción de ser más útil y poder servir mejor, que ayer por la mañanas.